viernes, octubre 27, 2006

Colores

Y un día sucedió, que cuando la lluvia cesó y al arcoiris apareció, por algún motivo no se desvaneció jamás, sino que se ensanchó más y más, hasta que cubrio todo el cielo, y en lugar de nubes sólo había colores, así que la gente al caminar, de azul a rojo podía cambiar y ya nada volvió a ser igual.

viernes, octubre 20, 2006

Escenas

Es una vieja tonada, de esas que uno ha escuchado en mil lugares distintos y siempre reconoce, aunque pocas veces recuerda el nombre. Es una canción alegre, pero en esta ocasión suena un tanto melancólica, si es que tal combinación es posible. Camino por los pasillos del metro preguntandome de donde viene, cuando alcanzo a distinguir, unos pasos adelante, a una pareja de ancianos. Él toca la armónica, la vista baja y concentrado en el sonido; aunque parece cansado mueve las manos con rapidez. La música fluye mecánicamente. A un lado está su compañera, una mujer que lo mira de cuando en cuando mientras sostiene un gastado sombrero en el que han caído algunas monedas.
Paso de largo y doy la vuelta para entrar en otro largo tunel, debilmente iluminado por pequeños puntos de luz que pretenden simular constelaciones. De repente regreso: nadie debe llegar a viejo y pedir limosna para sobrevivir. El simple hecho de vivir la vida hasta que las canas aparezcan y la gravedad debilite los huesos, es merito suficiente para que los días de ancianidad transcurran dignamente. No importa lo que has hecho en el camino, el final debería ser mejor. Deposito una moneda en el sombrero, son sólo cinco pesos, debe haber tres o cuatro pesos más en el fondo del gastado accesorio. ¿Porque no dí una moneda de mayor denominación? ¿debo ayudar a los otros sólo cuando no me vea perjudicado por ello? ¿o debería dar mi mano sin importarme lo que ocurra conmigo? ¿ayudar a desconocidos? ¿y mi familia? ¿y yo? ¿debería ignorar mi propia situación? otras personas son menos afortunadas que yo, ¿soy acaso responsable de ellas? quizá sea más fácil ignorarlas, o "ayudarlas" siempre siempre y cuando no me vea afectado por ello... que fácil postura la mía. ¿Predomina la indiferencia y la hipocrecía? ¿habra entonces alguna esperanza en el mundo?

Minutos después abordo el carro del metro que, como es costumbre a las siete de la noche, parece más una lata de alimentos en conserva que un transporte público. A mitad del camino noto un extraño silencio, que súbitamente ha impregnado el ambiente. Un movimiento inusual de gente parece formar círculo justo en el centro del vagón. En medio de todo, una persona se incorpora suavemente, casi ha caído, luce mal, pero ayudada por decenas de manos que le sostienen casi tiernamente, parece recuperarse. Es como... bueno, sólo a mi se me ocurre semejante comparación, es como el héroe de la película que luego de arriesgar la vida por lo que ama, cae inconsciente entre la gente que viaja por el tren de N.Y., es tan débil, tan vulnerable... cualquiera podría sacar provecho de la situación, pero en lugar de ello, recibe ayuda.

Quizá aún tengamos oportunidad, aún hay esperanza.

martes, octubre 17, 2006

Otro comienzo

Hoy.... hoy descubrí Ítaca, y sin embargo, el viaje apenas inicia:

ÍTACA

Cuando salgas en el viaje, hacia Ítaca
desea que el camino sea largo,
pleno de aventuras, pleno de conocimientos.
A los Lestrigones y a los Cíclopes,
al irritado Poseidón no temas,
tales cosas en tu ruta nunca hallarás,
si elevado se mantiene tu pensamiento, si una selecta
emoción tu espíritu y tu cuerpo embarga.
A los Lestrigones y a los Cíclopes,
y al feroz Poseidón no encontrarás,
si dentro de tu alma no los llevas,
si tu alma no los yergue delante de ti.
Desea que el camino sea largo.
Que sean muchas las mañanas estivales
en que con cuánta dicha, con cuánta alegría
entres a puertos nunca vistos:
detente en mercados fenicios,
y adquiere las bellas mercancías,
ámbares y ébanos, marfiles y corales,
y perfumes voluptuosos de toda clase,
cuanto más abundantes puedas perfumes voluptuosos;
anda a muchas ciudades Egipcias
a aprender y aprender de los sabios.
Siempre en tu pensamiento ten a Ítaca.
Llegar hasta allí es tu destino.
Pero no apures tu viaje en absoluto.
Mejor que muchos años dure:
y viejo ya ancles en la isla,
rico con cuanto ganaste en el camino,
sin esperar que riquezas te dé Ítaca.
Ítaca te dio el bello viaje.
Sin ella no hubieras salido al camino.
Otras cosas no tiene ya que darte.
si pobre la encuentras, Ítaca no te ha engañado.
Sabio así como llegaste a ser, con experiencia tanta,
ya habrás comprendido las Ítacas qué es lo que significan.

C. Kavafis

http://www.ciudadseva.com/textos/poesia/cavafis2.htm

jueves, octubre 12, 2006

Pretending to be alive

La ciudad puede ser muchas cosas, pero sobre todo, una ciudad son historias, millones de historias ocurriendo simultaneamente y sin parar. Muchas de ellas cruzandose entre si en un laberinto misterioso y quizá, indescifrable.
Venía camino al trabajo, cuando dijeron en el radio que, en medio del tránsito y en un taxi, una mujer había dado a luz. Nadie la acompañaba cuando abordo el vehículo, pero dada la urgencia del caso, el conductor hizo lo que pudo para llegar cuanto antes al hospital. Cambiar de carril aquí, acelerar un pequeño tramo, atajos por pequeñas calles no muy conocidas, y luego estacionarse en el mar de coches y camiones que había en la avenida principal. Ya sin esperanzas de llegar a tiempo, fue el chofer quien la asistio durante el nacimiento del bebé. Uno ve escenas así en las películas y a veces asustan, otras dan risa, pero siempre resultan asombrosas. Escenas así ocurren a diario en el mundo, en todo tipo de escenarios y como parte de historias tan interesantes como la vida. Hoy me entere de un fragmento de uno de tantos dramas-comedias-tragedias-épicas que pasan en mi ciudad. Me tope con él en ese laberinto que todos atravesamos, y tal vez ahora he tomado una pequeña desviación. Puede que sea insignificante, pero no lo sabre hasta hallar la salida.

Ayer estaba viendo en la IMDB la ficha de La tierra de los muertos, la última película de zombies de George Romero, encontre esta parte de un dialogo:

Mike: They're pretending to be alive...
Riley: Isn't that what we're doing? Pretending to be alive?