martes, junio 28, 2005

Extraña envoltura

"¿Cómo sabes si cada ave que surca los cielos no es un inmenso mundo de alegría, encerrado por tus cinco sentidos?"

William Blake, El matrimonio del cielo y del infierno.

¿Cómo saberlo? ¿cómo saber si nosotros mismos no lo somos? Contenida nuestra escencia en la piel, ¿será que sólo espera madurar para salir de su envoltura?
Tal vez al morir, solamente nos libramos del capullo que nos rodea.

lunes, junio 27, 2005

Vagando en el paisaje

Cuando por primera vez leí Frankenstein, me quede atrapado en sus páginas desde el mismo prólogo, he aqui un fragmento del mismo:

"En el verano de 1816 estuvimos en Suiza, donde fuimos vecinos de lord Byron. En un principio pasamos nuestras horas más agradables en el lago o vagando por sus villas. Lord Byron, que escribía entonces el tercer canto de Childe Harold, era, entre nosotros, el único que llevaba al papel sus pensamientos. Estos, que nos iba presentando, adornados con toda la luz y la armonía de la poesía, parecían poner algo de divino en las glorias del cielo y la tierra, cuyas influencias compartíamos con él."
"Más aquel verano fue húmedo y desagradable y las lluvias incesantes nos obligaban a menudo a pasar días enteros en la casa. Cayeron en nuestras manos algunos volúmenes de historias fantásticas, traducidas del alemán al francés. Estaba allí El relato del enamorado inconstante, el cual, cuando pensó en abrazar a la doncella a quien se prometiera, se encontró en brazos del pálido fantasma de la mujer por él abandonada. Hallamos también la historia del depravado fundador de su raza cuyo destino desgraciado lo condenaba a dar un beso de muerte a los hijos menores de su casa embrujada, precisamente al llegar a la pubertad. A los rayos vacilantes de la luna podía verse, a media noche, su forma gigantesca y oscura, ataviada con una amardura, como el duente de Hamlet, pero con el yelmo levantado, y que avanzaba lentamente a lo largo de la lúgubre avenida. Perdíase aquella forma detrás de la sombra de los muros del castillo; más no tardaba en oirse crujir una puerta y el ruido de unos pasos. Abríase la puerta de la habitación y avanzaba hacia los niños, vencidos por el sueño de la juventud y la salud..."
"...-Escribamos una historia de fantasmas cada uno de nosotros -dijo lord Byron, y su proposición fue acepatada."


Seguramente aquellos tiempos y lugares de Mary Shelley no eran como yo los imagino, pero no dejo de pensar en lo fantástico que me parecería caminar al resguardo de magníficos paisajes de montañas y bosques con pequeños lagos, mientras, acompañado de tus amigos dejas volar tu imaginación hacia historias no contadas y paraísos no creados. Resguardarte bajo la lluvia y conversar sobre ideas que se queden dando vueltas y vueltas en tu cabeza hasta pasada ya la "hora de las brujas" sin dejarte dormir de la emoción.

¿Sera posible todavía? ¿lo sería alguna vez?

Intentemoslo, anda, caminemos hacia allá y platiquemos.

domingo, junio 26, 2005

El ocio del domingo

Sólo en el silencio la palabra,
sólo en la oscuridad la luz,
sólo en la muerte la vida;
el vuelo del halcón
brilla en el cielo vacío.

Ayer me encontré con el primero de los libros de Terramar de Ursula K. Le Guin, y decidí comprarlo. Todavía no lo empiezo a leer, pero siempre los hojeo cuando llego a casa después de traerlos de la librería. En las primeras páginas me encontré con lo que he puesto arriba. Me gusta.

Debe poder entenderse de muchas forma, ahora se me ocurre que la muerte no existe, hasta que lo hace la vida, y la oscuridad no es visible, hasta que nace la luz.

¿Es el mundo un juego de opuestos y complementos?

Una tarde de domingo me parece bien para pensar en ello, ¿o lo reservaré para las horas tormentosas en el trabajo? Me gusta la segunda opción, ahora es tiempo de jugar un poco. Ese playstation luce un poco empolvado.

sábado, junio 25, 2005

Por las mañanas

Una de las primeras cosas que hago al despertarme es poner un disco, para ayudarme a soportar los primeros minutos del día (no siempre me resultan sencillos).
A veces pop, a veces rock, un poco de clásico no está mal para variar. Pero no hay nada, nada igual a despertar con una buena canción de blues.

Hoy tuve la fortuna de toparme con Skip James y su evocadora voz:

Devil got my woman

I'd rather be the devil, to be that woman man
I'd rather be the devil, to be that woman man
Aw, nothin' but the devil, changed my baby's mind
Was nothin' but the devil, changed my baby's mind

I laid down last night, laid down last night
I laid down last night, tried to take my rest
My mind got to ramblin', like a wild geese
From the west, from the west

The woman I love, woman that I loved
Woman I loved, took her from my best friend
But he got lucky, stoled her back again
And he got lucky, stoled her back again

Increible...

jueves, junio 23, 2005

Un lugar insospechado

Al caminar por la ciudad sin un destino fijo, uno nunca sabe que esperar a la vuelta de la esquina.

Entre largas calles y pequeños jardines, cerca de angostos callejones y coloridas plazas, existe un lugar al que por casualidad, llegué sin proponérmelo un domingo al mediodía, mientras el sol era eclipsado por la presencia de inmensas nubes dispuestas a soltar su carga a la menor provocación.
Andando junto a bellas casas viejas que rodean una hermosa fuente, siempre visitada por niños y amantes juguetones, mis pasos fueron detenidos en un oscuro rincón al pasar cerca de una construcción sombría y antigua, de apariencia lúgubre y jardines desordenados; una casa abandonada cuya figura no puede menos que llamar la atención de quienes caminan junto a ella.

La fachada, con sus amplias ventanas descuadradas y bisagras desmembradas, luce descompuesta, ya que la casa está hundida y lo que pudieron ser escalones ahora están inclinados y ocultos bajo el nivel del suelo. Los marcos de las puertas se han vencido, y los viejos candados y seguros oxidados, no parecen suficientes para impedir la entrada a quien se atreva a intentarlo. No es física la cerca que protege los patios, estancias y pasillos solitarios.

El hundimiento asimétrico ha dejado el extremo izquierdo de la casa con el segundo piso apenas sobre el nivel del suelo, mientras el derecho parece esforzarse inútilmente en equilibrar la inmensa balanza con perpetuos y malogrados esfuerzos.

La tentación de asomarse sobre la reducida barda para ver al amplio jardín es irresistible, y las consecuencias son más que inesperadas: Las dimensiones de la casa son mayores de lo que su derruida apariencia exterior deja ver, más allá de la construcción principal, otro edifico similar en proporciones, se encuentra separado del primero por un pasaje ahora cubierto por la maleza, misma que ha alcanzado insospechadas alturas apoderándose de las paredes cercanas.

Vuelvo a ver el frente de la abandonada morada con atención, y encuentro, en medio de ella, una grieta apenas visible que corta con aterradora perfección en dos partes el inmueble.

La casa de Usher no es sólo un cuento, la he encontrado.

miércoles, junio 22, 2005

Marte

Hace ya algún tiempo que leí el primero de los libros de la trilogía de Marte de Kim Stanley Robinson. Aún no he conseguido la segunda y la tercera parte, pero seguro que lo haré, porque con la primera pase muy buenos momentos. Imaginar que llegamos a nuestro vecino mundo y comenzamos a poblarlo es emocionante.
En algún lugar leí que las películas post apocalítpticas eran tan populares porque la idea de comenzar de nuevo, con un nivel de conocimiento mayor sobre las posibles consecuencias de tus actos, así como de una cierta libertad, era algo naturalmente atrayente para los humanos. Bien, otros planetas nos brindan esa misma posibilidad, pero sin necesidad de un apocalípsis.

Uno de mis pasajes favoritos del libro es cuando, uno de los protagonistas, poseedor de un contagioso optimismo, menciona lo siguiente en su discurso a los colonos:


"Marte estaba vacio antes de que llegaramos. Esto no significa que nunca hubiera sucedido nada. El planeta había conocido dilataciones, fusiones, perturbaciones, y al fin se había enfriado, dejando una superficie marcada por inmensas cicatrices geológicas: cráteres, cañones, volcanes. Pero todo eso ocurrió en la inconsciencia mineral, sin que nadie lo observara. No hubo testigos, excepto nosotros, que mirábamos desde el planeta vecino, y eso solo en el último momento de una larga historia. Marte no ha tenido nunca otra conciencia que nosotros.

Ahora todo el mundo conoce la influencia de Marte en la cultura humana: para las generaciones de la prehistoria era una de las luces principales del cielo, a causa de su color rojo y de las fluctuaciones de su luz, y por como retrasaba su curso errante entre las estrellas, y a veces, incluso lo invertía. Parecía que con todo aquello quisiera decir algo. Así pues, no sorprende que los nombres mas antiguos de Marte pesen de un modo peculiar en la lengua: Nirgal, Mangala, Auqakuh, Harmakis. Suenan como si fueran aún mas viejos que las lenguas antiguas en las que los encontramos, como si fueran palabras fósiles de la edad de hierro o anteriores. Sí, durante miles de años Marte tuvo un poder sagrado para los humanos; y su color lo convirtió en un poder amenazante, ya que representaba la ira, la sangre, la guerra y el corazón.

Luego los primeros telescopios nos dieron una imagen más próxima, y vimos el pequeño disco anaranjado de polos blancos y manchas oscuras, que se expandían y se contraían junto con largas estaciones. Ningún avance en la tecnología del telescopio nos dió mucho mas: pero las imágenes captadas desde la Tierra bastaron a Lowell para inspirarle una historia, la historia que todos conocemos, la de un mundo agonizante y un pueblo heroico, que construía canales desesperadamente para contener la última y mortal invasión del desierto.

Era una gran historia. Pero luego las sondas Mariner y Viking enviaron sus fotografías, y todo cambió. Nuestro conocimiento de Marte se multiplicó, literalmente supimos millones de veces mas sobre este planeta. Y ahí ante nosotros apareció un mundo nuevo, un mundo insospechado.

Sin embargo, parecía un mundo sin vida. Se buscaron señales de vida marciana pasada o presente, desde microbios hasta construcciones de canales, o incluso visitantes alienigenas. Como todos saben, nunca se ha encontrado una sola prueba. Y, así, las historias han florecido de manera natural para llenar el vacío, igual que en el tiempo de Lowell o de Homero, o como en las cuevas o en la sabana...historias de microfósiles destruidos por nuestros bioorganismos, de ruinas encontradas en medio de las tormentas de polvo y luego perdidas para siempre, de un gigante y sus aventuras, de un pueblo de pequeños y esquivos seres rojos, siempre vislumbrados fugazmente de soslayo. Y todas esas historias se hilvanan en un intento por dar vida a Marte, o por traerlo a la vida. Porque todavía somos esos animales que sobrevivieron a la edad de hielo, y contemplaban el cielo nocturno maravillados y contaban historias. Y Marte jamás ha dejado de ser aquello que fué para nosotros desde el principio mismo: una gran señal, un gran símbolo, un gran poder.

Y entonces llegamos aquí. Había sido un poder; ahora se convirtió en un lugar."

miércoles, junio 15, 2005

Atrapado

Es verdad. Nada me sucede, nada cambia. Me encuentro perdido entre días que me parecen todos iguales y trato de refugiarme en cualquier resquicio lleno de ilusiones que me permita soportarlo. Es lo que siempre he hecho, sólo que últimamente nada parece suficiente, nisiquiera la lectura maravillosa del Paraíso perdido.

Me gusta ver el mundo lleno de luz y de colores, pero hoy no puedo mas que apreciarlo tan gris como el cielo que se cierne sobre la ciudad, como anunciando una refrescante lluvia luego de días de intenso calor. Espero que al liberarse el agua de su prisión en las alturas, yo también pueda escapar un poco de la mía.

Gracias por visitar el blog a pesar del abandono en que lo tengo.

martes, junio 07, 2005

Te estaré observando...

The police no es mi grupo favorito, ni está entre los primeros en mis predilecciones. Esto, sin embargo, no evita que haya un par de canciones que sí se coloquen entre mis preferidas, por ejemplo Roxanne. Cada que la escucho no puedo evitar emocionarme. Aún así, este post no es dedicado a esa canción, sino a una que me resultaba bastante indiferente, pese a ser, tal vez, la más conocida del grupo. Me refiero a Every breath you take. Apenas ayer me enteré que no es una canción romántica o amorosa. Todo lo contrario, es sobre venganza y rencor. Me gusta imaginar que, en una noche en donde la bruma de la desolación flotaba en el ambiente, Sting, un poco ebrio, tomo su pluma y comenzó a escribirla.
Le he dado un vistazo a la letra escuchando la música una vez más, y el efecto resultó bastante diferente a lo que siempre me había causado:

Every breath you take

Every breath you take
Every move you make
Every bond you break
Every step you take

I'll be watching you

Every single day
Every word you say
Every game you play
Every night you stay
I'll be watching you

Oh can't you see
You belong to me
How my poor heart aches with every step you take

Every move you make
Every vow you break
Every smile you fake
Every claim you stake

I'll be watching you

Since you've gone
I've been lost without a traceI dream at night
I can only see your face
I look around but it's you I can't replace
I feel so cold and I long for your embrace
I keep crying baby, baby please

Every move you make
Every vow you break
Every smile you fake
Every claim you stake

I'll be watching you

Si, el sentido cambia por completo ahora. Creo que empieza a gustarme...